La familia Kılıçaslan contó sobre ese iftar: Eran como uno más de la familia
Miscelánea / / April 22, 2022
La familia Kılıçaslan, donde el presidente Recep Tayyip Erdoğan y su esposa Emine Erdoğan fueron invitados a la mesa iftar en Ümraniye, Estambul, experimentaron una gran felicidad.
ubicado en sabah noticiasde acuerdo a; Ministro Recep Tayyip Erdogan La familia Kılıçaslan de cinco, que había sido recibida por su esposa Emine Erdoğan y su esposa Emine Erdoğan en la mesa de iftar en Ümraniye, Estambul, experimentó una gran felicidad y emoción.
El presidente Erdoğan y su esposa Emine Erdoğan, quienes conversaron con las hijas del matrimonio Neslihan-Ersin Kılıçaslan, Serra, Kübra y Yüsra, y entregaron obsequios, se convirtieron en la agenda de las redes sociales con su cálida relación con la familia.
Emine Erdoğan expresó su gratitud a la familia Kılıçaslan en la publicación que compartió en su cuenta de Twitter, "Hoy fuimos invitados a la cena de desayuno de la familia Kılıçarslan en Estambul. Charlamos con las hermosas chicas de la casa, Serra, Kübra y Yüsra. Los logros escolares son encomiables. Gracias por su sincera hospitalidad. Que las bendiciones del Ramadán no falten en vuestras mesas..."
"NOS SENTIMOS QUE NUESTRA FAMILIA MAS FUE VENIDA"
Ersin Kılıçaslan, empleado de una empresa naviera privada, le contó a SABAH sus sentimientos y experiencias después de la cena de ruptura del ayuno. Continuó sus palabras afirmando que una vez más entendía por qué los niños llamaron sinceramente al presidente Erdoğan 'Tayyip Dede'. posee:
“No fue una comida burocrática ordinaria. No había distancia entre nosotros. Era como si hubieran venido nuestros mayores y familiares. Te tratan como uno más de la familia. Mis hijas eran muy tímidas al principio. El comportamiento sincero de nuestro Presidente y su esposa los tranquilizó. Hablaron sobre la vida escolar y los logros de mis hijas. Cuando nuestro Presidente supo que mi difunto padre también era empleado del IETT, nos contó la historia de su partida y sus experiencias. Sus conversaciones fueron muy agradables. Cuando supieron que mi abuela la amaba mucho, fueron a ella. Mi abuela les dio jugo de cerezas hecho a mano, que ella misma hizo. Cuando salíamos de nuestra casa, los niños del barrio gritaban 'Tayyip Dede' sobre los hombros de su padre. Habló cálidamente a todos los niños uno por uno, les dio regalos. Una vez más entendí por qué los niños lo llamaban 'Dede Tayyip'".